Una de las voces más fuertes se elevaron desde Córdoba, con pronunciamientos del sector empresario pero además, en este caso, de la administración del peronista crítico Juan Schiaretti.
“Lo estuvimos evaluando con empresarios y, en misma línea de lo que dijo el presidente de la Unión Industrial Argentina, opinamos que hay que trabajar fuertemente para revertir este tipo de decisiones que sin duda perjudican a la industria cordobesa”, afirmó a Cadena 3 el ministro de Industria, Comercio y Minería provincial, Eduardo Accastello.
El funcionario remarcó que la iniciativa afecta a “aquellos bienes intermedios que luego se industrializan en la provincia”. “Para nosotros esto es muy importante, porque hoy en Córdoba el sector productivo e industrial está creciendo y sin duda este tipo de restricciones aumenta la imprevisión que tiene hoy la industria argentina”, recalcó, además de resaltar que al “limitar y restringir importaciones, impacta directamente sobre todo en empresas que tienen un gran mercado de exportaciones”. “Nos faltan productos, nos faltan dólares y toman este tipo de medidas que impactan en sectores que están evolucionando y creciendo. Es una contradicción muy fuerte”, lanzó.
En sintonía, el titular de la Unión Industrial de Córdoba, Marcelo Uribarren, planteó que es “un problema para el que usan siempre la misma receta: el cepo”.
“Creemos que este último cepo va a restringir la producción aún más de lo que ya venía pasando y estamos ante un serio inconveniente”, dijo. Y precisó que, aunque depende de cada sector, “entre un 50% y un 60% de los insumos industriales son importados”.
Los planteos del sector empresario brotaron también desde Santa Fe, socia de Córdoba en la poderosa Región Centro y que gobierna el peronista Omar Perotti.
“Si nos limitan las importaciones no vamos a poder producir”, agitó por caso el presidente de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de Rosario, Roberto Lenzi, en el marco de un escenario donde ya hay “faltantes en varios insumos” y de un sector que “recuperó los niveles de venta de prepandemia”.
En sintonía, desde San Juan, el presidente de la Unión Industrial local, Ricardo Palacio, afirmó que “esto puede derivar en un parate en la producción, porque hay materias primas o productos necesarios para producir”.“En algunos casos procesamos materias primas para transformarlas en productos que luego exportamos, generándole un valor agregado; esa es una de las principales preocupaciones por estas trabas que se han impuesto”, dijo, en declaraciones consignadas por El Zonda.
Por esa senda marchó también el secretario General de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de Mendoza, Julio Totero. “Las trabas en las importaciones no van a generar ahorro de divisas sino más recesión, desempleo y problemas en la economía”, alertó, en diálogo con Radio Mitre Mendoza.
Por su parte, el presidente de la Cámara de Comercio Exterior de Entre Ríos, Aquiles Arús, calificó a las medidas de “un nuevo manotazo de ahogado”. “Lo que este Gobierno parece no entender es que la industria argentina necesita insumos importados para poder producir”, dijo, y tildó a la medida de “desatinada”.
El lunes el Banco Central decidió adaptar el sistema de pagos del comercio exterior, para responder a las necesidades extraordinarias de divisas para atender la importación de energía. Las medidas extienden el sistema de financiación de importaciones a las realizadas bajo Licencia No Automática y a la importación de servicios y tendrán vigencia por un trimestre, para dar tiempo a la normalización del comercio exterior, precisó la entidad. Las pequeñas y medianas empresas quedarán exceptuadas de las exigencias vigentes de financiar sus importaciones por un incremento de 15% respecto al año anterior, con un límite de hasta un millón de dólares.