Cuando aún permanece fresco el renunciamiento el pasado lunes del radical Rodrigo de Loredo que dio paso a la candidatura a gobernador de Luis Juez (Frente Cívico) por Juntos por el Cambio en Córdoba, dirigentes de una línea interna de la UCR local desembarcaron ayer en la Justicia Electoral para exigir al centenario partido y a la coalición un “urgente” llamado a una interna abierta -en la provincia no hay PASO- como método para definir esa fórmula y otros cargos electivos para los comicios del próximo 25 de junio.

La presentación -liderada por Javier Fabre, quien encabeza la línea intestina Córdoba, de impronta angelocista y con participación minoritaria en materia de congresales partidarios- fue elevada ante la jueza con competencia electoral Marta Vidal.

La embestida llevó al plano judicial el rechazo a la metodología que aplicó JxC para dirimir la postulación a gobernador: la de una encuesta de intención de voto, que culminó el pasado sábado en un “empate técnico” y que derivó en el paso al costado de De Loredo para “evitar los errores del pasado” y no partir en dos la oferta opositora en las urnas.

El reclamo incluye otro pedido puntual: que, hasta tanto se expida la magistrada, Juez deje de presentarse como el candidato de Juntos por el Cambio y se muestre en cambio solo como un “precandidato” de la coalición.

La estocada en el fuero electoral llega cuando la expectativa estaba puesta ya en el próximo paso que dará el diputado nacional De Loredo, quien aún no definió públicamente qué candidatura asumirá en los comicios del 25-J, en los que el peronista Martín Llaryora buscará retener el poder que deja el mandatario Juan Schiaretti (Hacemos por Córdoba).

En el Concejo Deliberante de Córdoba le brotó el pasado miércoles una limitación a su paleta de opciones: prohibieron las candidaturas simultáneas o “testimoniales”, por lo que no podrá activar un doble juego de postulación a vicegobernador de Juez y a intendente capitalino. Mientras tanto, Juez y De Loredo se disponían ayer a dar otra señal de trabajo conjunto, de la mano de la participación en el cierre de campaña del candidato radical para las elecciones del próximo domingo en la localidad de Hernando (ver aparte).

Planteos

Los dirigentes que desembarcaron ayer en el fuero electoral entienden que recurrir a definir candidatos vía una encuesta de intención de voto representa una “sustitución ilegal del sistema de votación” que genera una “violación al derecho de sufragio” y de “participación y representación de las minorías partidarias”.

“Por primera vez, en más de 130 años de historia, el radicalismo de Córdoba no va a presentar candidato a gobernador”, había asegurado Fabre en la previa al desembarco en el fuero electoral.

Por fuera de la presentación de ayer, también cuestionan la reciente prórroga de mandatos por un año aprobada por el congreso partidario (medida adoptada con el guiño de las líneas referenciadas en Mario Negri, en De Loredo y en Ramón Mestre).

“La prórroga de autoridades salió por 95 votos contra 4”, dijeron ayer a este diario desde filas radicales, y resaltaron que en las elecciones de 2017 también hubo prórroga de mandatos. Y apuntaron a la escasa representatividad de Fabre: “Tiene el 0,01% de los congresales del partido”, aseguraron.