La institucionalización del Frente de Todos tiene como objetivo final equilibrar las fuerzas, generar mayor caudal de voz y representación para el resto de los componentes activos de la coalición sin dejar de lado el peso real del PJ en la Provincia.

Es por eso que la idea es desarrollar una serie de reuniones con todos los actores que conforman la coalición para fortalecer el espacio de discusión y debate interno y las definiciones en torno a la realidad bonaerense

En ese marco, el gobernador Axel Kicillof recibió en la Casa de Gobierno de la Provincia al presidente del PJ bonaerense, Máximo Kirchner, Malena Galmarini (Frente Renovador), Carlos Castagneto (Kolina), Mario Secco (Frente Grande) y Mónica Macha (Nuevo Encuentro). Se trata de los cuatro partidos con los que, a nivel local, el kirchnerismo tiene mayor afinidad. Incluso con el massismo, que apoya firmemente la reelección de Kicillof.

“Una cosa es el distrito, otra la Provincia y ni hablar de la Nación. Ya dejamos en claro que vamos por otro mandato de Kicillof y cuando llegue el momento de hablar de los candidatos nacionales también nos pronunciaremos. Está claro que Sergio (Massa) es un actor clave del Frente de Todos”, le dijo a Ámbito un diputado bonaerense del Frente Renovador.

Días atrás, Eduardo Valdés, diputado nacional y amigo personal del presidente Alberto Fernández, había manifestado que “tal vez es un buen momento para institucionalizar al Frente de Todos» al sostener que «no se pueden ocultar las diferencias» y que «no está mal que las coaliciones se sinceren y se trabaje sobre estas posiciones«.

Y puso como ejemplo lo ocurrido en Uruguay con José Mujica. “Una de las grandes virtudes que tuvo el Frente Amplio, que gobernó con éxito tantos años en Uruguay, fue tener institucionalizadas las diferencias”.

La intención de la Provincia es seguir la línea de lo ejecutado semanas atrás por el gobernador de Chaco, Jorge “Coqui” Capitanich, quien con el fin de fortalecer los lazos internos y amplificar las voces que forman parte del espacio llamó en su momento a institucionalizar el Frente de Todos. Algo que llevó a cabo en los últimos días.

“Unidad en la diversidad”, afirmaron desde Chaco como base de identidad de un Frente de Todos que, hasta ahora, posibilitó el armado de un Consejo Ejecutivo en el que cada partido participa igualitariamente con voz y voto. Y que, además, plantea un congreso donde todos los partidos que forman parte del FdT tienen una participación porcentual de afiliados y en la que el justicialismo local atenúa su representación para, justamente, tener un porcentual de congresales más equilibrado.

Es por esto que, como parte de la proclama del FdT local, el gobernador chaqueño busca hacerle llegar a sus pares la necesidad de promover un gobierno nacional sin centralismos. Con un estado que descentralice la gestión pública a provincia y municipios con una nueva ley de coparticipación. Y una organización que permita que los bienes públicos sean ejecutados por los municipios y las provincias.

Chaco dio el primer paso y Buenos Aires amaga con seguirlo. Resta saber si el resto de las provincias irán en la misma línea.