La ola de robos en supermercados y otros locales en distintos puntos del país tuvo fuerte incidencia en el conurbano bonaerense. Y más allá de que desde el Gobierno provincial descartaron saqueos, el mandatario provincial, Axel Kicillof, se reunió con algunos intendentes (con otros habló por teléfono) para interiorizarse sobre la situación local, brindarles su apoyo y, además, acompañar todo tiempo de medidas dispuestas a generar la paz social.

Por los hechos ocurridos en Tres de Febrero, José C. Paz, Tigre, Escobar, Moreno, Pilar y San Martín, entre otros, se llevaron a cabo detenciones y pusieron en alerta a los jefes comunales de la zona sur del conurbano.

Es que, como parte de una acción que fue catalogada como “robos organizados”, la mayoría de los hechos ocurrieron en la primera sección electoral de la Provincia. Algo que no se replicó en la tercera, la más populosa.

“Hubo una campaña y preparación de los hechos. Hubo falsas denuncias que circularon por redes, de cosas que no estaban ocurriendo», aseveró el gobernador en declaraciones. Algo que replicaron los jefes comunales. Por caso, Mariel Fernández, a cargo de Moreno, aseguró que “son hechos delictivos organizados que se están investigando. Tenemos imágenes de grupos de jóvenes en camioneta señalando lugares”.

Mientras que desde Quilmes, donde manda Mayra Mendoza, emitieron un comunicado en el que hace referencia a “la difusión de mensajes y falsas noticias, principalmente en redes sociales sobre supuestos saqueos a centros comerciales que tienen como objetivo alterar la paz social”. Eso sí, en los distritos donde todavía no se registraron este tipo de maniobra se pusieron en marcha “acciones preventivas”.

A diferencia de lo expresado por la portavoz, Gabriela Cerruti, quien le apuntó al candidato presidencial, Javier Milei, los jefes comunales no cargaron las tintas contra nadie en particular, pero por lo bajo dejaron en claro que detrás de lo sucedido “hay un claro interés político” de cara a las elecciones de octubre.

Mirada hacia arriba

Hoy los jefes comunales esperan una mano directa de la Nación para contener una situación que no quieren que se vuelva en su contra a nivel local y que, a la vez, pueda perjudicarlos en los comicios de octubre.

Es por esto que volvió a quedar en evidencia la necesidad de contar con una fuerza capaz de ponerse al frente ante hechos de esta característica. “No podemos vivir siempre una paso atrás. Estamos haciendo las cosas con el resultado del lunes. Gendarmería ya tendría que estar a disposición como se había prometido”, le dijo a este medio un jefe comunal del GBA en clara referencia a lo prometido por el ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández, de crear una serie de bases federales en la Provincia. Algo que nunca sucedió pese a ya tener elegida las postas.

Impacto interno

El intendente de Escobar, Ariel Sujarchuk, firmó un decreto en el que se establece que la Municipalidad de Escobar suspende todo tipo de subsidios, becas y cualquier posibilidad de acogerse a programas municipales entre todas aquellas personas que se encuentren vinculadas y/o fomenten hechos de violencia.

“Desde el primer momento repudiamos estas maniobras espurias que utilizan a niños, niñas y adolescentes y por eso disponemos todas las herramientas del estado municipal para ir contra quienes instigan estos episodios. Por un lado, aportando todos los datos que tenemos a la Justicia y recabando material probatorio para sancionar a los responsables”, aseguró Sujarchuk.

Y decretó que cortará de cuajo la posibilidad de que los implicados sean “beneficiados por las políticas del Estado, que de ninguna manera puede subsidiar a aquellos que delinquen o instigan a la violencia”.