Así, el jueves 9 de febrero será el turno de los gremios de la administración central, es decir la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN) y la Asociación Trabajadores del Estado (ATE).

Ese mismo día dará comienzo la crucial discusión con la Asociación del Magisterio de Santa Fe (Amsafé), el Sindicato Argentino de Docentes Particulares (Sadop), la Unión Docentes Argentinos (UDA) y la Asociación del Magisterio de la Enseñanza Técnica (AMET).

En rigor, el avance de esta negociación es central para poder garantizar un inicio de clases sin paros ni conflictos docentes.

En la provincia las clases comenzarán el 1° de marzo.

En tanto, el viernes 10 de febrero las autoridades recibirán a los gremios del sector Salud, la Asociación de Médicos de la República Argentina (AMRA) y el Sindicato de Profesionales Universitarios de la Sanidad (Siprus).

Gestiones

El ministro de Trabajo y Seguridad Social, Juan Manuel Pusineri, explicó que la convocatoria se da “en el marco de la negociación colectiva con los trabajadores y representantes de los gremios del sector público provincial” para cumplir “lo acordado en la reunión paritaria del mes de diciembre”.

El funcionario del gobierno de Omar Perotti precisó que con UPCN y ATE se iniciarán las reuniones el jueves 9 a las 11, en tanto el mismo día, pero a las 18, recibirán a los dirigentes de los gremios docentes.

“Por último, el viernes 10 de febrero, a las 11, vamos a estar convocando a los gremios de los profesionales de la salud. A su vez, vamos a estar conversando con las empresas que negocian en el ámbito de la provincia para que vayan combinando las fechas de las reuniones paritarias con los gremios respectivos”, añadió.

Pusineri remarcó que “la provincia de Santa Fe apuesta a la negociación colectiva, reivindica el espacio de diálogo colectivo como el mejor ámbito para darle tratamiento a los derechos de los trabajadores públicos y a lo relativo al funcionamiento del Estado”.

Este martes, el Gobierno de Axel Kicillof recibió a los principales gremios docentes y de estatales. Aunque no realizó una oferta salarial, el encuentro marcó el comienzo de la puja salarial 2023, clave en un año electoral en el que muchos de los oficialismos se juegan su continuidad.