Con el sacudón aún caliente por el triunfo del diputado nacional y dirigente petrolero Claudio Vidal en los comicios del pasado domingo bajo el sello de un lema opositor, la gobernadora Alicia Kirchner salió a brindar rápidamente un guiño al mandatario electo en pos de una transición ordenada en Santa Cruz.

“Un saludo especial al gobernador electo Claudio Vidal, le deseo lo mejor en su gestión de gobierno y quedo a disposición para esta transición. Santa Cruz lo merece”, posteó en la mañana de ayer la titular del Ejecutivo sureño.

La coordinación por la transición fue un tema que, de hecho, ya comenzó a ser abordado en el marco de una conversación telefónica que, según trascendió, ambos mantuvieron en las últimas horas.

De la mano de un lento conteo por la ley de lemas, recién entrada la madrugada quedó confirmada la victoria de Vidal, que abortó el sueño oficialista de extender los 32 años de comando consecutivos en su cuna fundacional. Escrutado el 99,02% de los sufragios, el lema Por Santa Cruz se impuso por el 46,48%, con Vidal como el candidato del sublema más votado. El segundo lugar fue para Unión por la Patria, con el 43,82% (internamente, finalmente quién cosechó más sufragios fue el intendente capitalino Pablo Grasso, con sólo 1.413 votos por encima de su par de El Calafate, Javier Belloni). Tercero y muy lejos quedó Cambia Santa Cruz, con el 8,51% (con la diputada nacional radical Roxana Reyes como la más votada).

“Soy un trabajador al igual que ustedes y quiero poner de pie a esta provincia”, arengó Vidal (de 43 años) pasadas las 4 de la madrugada sobre un escenario montado frente al local del partido Ser Energía para Renovar (SER). “En el nuevo gobierno no puede haber soberbia, tiene que haber diálogo y generar consenso, tenemos que trabajar entre todos porque es la única manera de sacar a esta provincia adelante”, subrayó el dirigente de extracción peronista.

El diputado nacional, secretario general del Sindicato Petrolero y Gas Privado de Santa Cruz y presidente de SER ya había sido candidato a gobernador en 2019 en un sublema del oficialismo, mientras que en 2021 pegó el salto: fue la segunda fuerza en las parlamentarias nacionales, esta vez ya en un frente por fuera del kirchnerismo.

El huracán de Javier Milei también golpeó a Santa Cruz, donde fue el precandidato presidencial más elegido. Pero en el rubro al Congreso sí triunfó UP, que como cabeza de lista al Senado lleva como candidata a la saliente gobernadora (sin lista de La Libertad Avanza, el voto en blanco trepó a cifras siderales y rondó el 62%).

En paralelo, y producto del dictado de las urnas, la Legislatura cambiará desde diciembre su conformación: el oficialismo perdió los dos tercios y se convertirá en la primera minoría (con 12 escaños, 4 menos de los que hoy tiene), mientras que Por Santa Cruz ocupará otros 11 (7 más que en la actualidad). Golpeado, Cambia Santa Cruz tendrá sólo una banca (perderá 3).

El año electoral no terminó sin embargo para Santa Cruz en materia de cargos locales, a partir de la estrategia del oficialismo provincial de reeditar el desdoblamiento en el calendario aplicado en 2019.

Así, quedó para el 22-O -en simultáneo con la elección nacional- la votación de intendentes. Un corrimiento que, en los hechos, permitirá recoger heridos electorales que dejó este domingo y que podrán apostar a nuevas candidaturas. En esa línea, ayer Grasso no descartó pelear su reelección en Río Gallegos.