fotos de la estacion luis guillon para efemerides el dia 5 de noviembre de 2021

Desde la inauguración de la estación Monte Grande en 1889, la llegada del ferrocarril marcó un punto de inflexión en el desarrollo urbano, comercial y social del distrito. El ramal del Ferrocarril del Sud —hoy Línea Roca— conectó a esta región del sur bonaerense con la Ciudad de Buenos Aires y otras localidades, permitiendo no solo el traslado de personas, sino también el transporte de productos agropecuarios y manufacturados que dinamizaron la economía local.

La estación Monte Grande se convirtió rápidamente en un núcleo urbano. A su alrededor surgieron comercios, almacenes, talleres y servicios que dieron forma a un nuevo centro de actividad. Lo mismo ocurrió con las estaciones de Luis Guillón, El Jagüel y 9 de Abril, donde la presencia ferroviaria atrajo inversiones y generó asentamientos que con el tiempo evolucionaron en barrios consolidados.

El ferrocarril fue también un factor determinante en la vida cotidiana de los vecinos. Permitía viajar a la Capital para trabajar o estudiar, y favorecía el vínculo entre comunidades cercanas. En paralelo, facilitó la llegada de inmigrantes y trabajadores que buscaron establecerse en un territorio que ofrecía accesibilidad y oportunidades.

Con el correr del tiempo, el auge del transporte automotor y los cambios en la matriz productiva redujeron el protagonismo del tren. Sin embargo, su huella permanece en el trazado urbano y en la memoria colectiva. Hoy, muchas de las estaciones han sido modernizadas, y bajo la gestión del intendente Fernando Gray, se han mejorado los entornos ferroviarios para promover espacios públicos seguros y accesibles.

En definitiva, el tren no solo trajo progreso: construyó comunidad. Su influencia sigue viva en cada rincón del distrito, recordándonos que el desarrollo se mueve —literalmente— sobre rieles.

Deja un comentario