A una semana del asesinato del chofer Daniel Barrientos en La Matanza y la posterior agresión al ministro Sergio Berni en una protesta de colectiveros, el gobernador bonaerense Axel Kicillof mantuvo ayer una “reunión de trabajo” con representantes de cinco cámaras de empresas de transporte urbano de pasajeros y con dirigentes de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) en el que acordaron, entre otros ejes, activar “en las próximas semanas” la transmisión de las 1.800 cámaras que ya están instaladas en los colectivos, con foco en blindar el combate contra la inseguridad.

Se trata de una de las iniciativas en el marco de la puesta en marcha de dos mesas de trabajo en simultáneo:

* una con la cartera de Seguridad, donde se avanzará con la instalación de unidades móviles de efectivos de la Policía provincial en “puntos sensibles” identificados por los delegados de los choferes y en la continuidad de los controles con personal del grupo especial UTOI, y

* otra con Transporte, para el seguimiento de los avances en materia de sistemas de monitoreo.

Respecto del último punto, además de apurar en lo inmediato la transmisión al Centro de Monitoreo del Gobierno bonaerense (chip 4G mediante), se dejó en claro la necesidad de que las empresas avancen en la instalación de las cámaras en el resto de las unidades, para lo cual el Ejecutivo ya les destinó subsidios por $2.700 millones. Pero, acorde a las urgencias derivadas en materia de faltantes de stock de cámaras y problemas de importaciones, se definió trabajar en el “mientras tanto” en la instalación de botones antipánico en las unidades, que deberán ser costeados por las empresas.

A la reunión, desplegada desde las 15 en la Casa de Gobierno, asistieron Berni (Seguridad) y su par de Transporte, Jorge D’Onofrio; el jefe de Gabinete, Martín Insaurralde, y el jefe de Asesores, Carlos Bianco.

Como en el cónclave de urgencia del pasado lunes, en el marco de una jornada tensa, también fue de la partida ayer el secretario general de UTA, Roberto Fernández.

Por la vereda empresarial,en tanto, asistieron representantes de la Cámara de Transporte de la Provincia de Buenos Aires (CTPBA); de la Cámara Empresaria de Autotransporte de Pasajeros (CEAP); de la Cámara Empresaria del Transporte Urbano de Buenos Aires (CETUBA); de la Cámara de Empresarios Unidos del Transporte Urbano de Pasajeros de Buenos Aires (CEUTUPBA), y de la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA).

Tras la reunión, desde filas empresariales dejaron entrever que, en medio de las dificultades para sostener la actividad,para financiar las medidas de seguridad que restan “habría que llevar el boleto a 300 pesos”.

Desde despachos oficiales, sin embargo, volvieron a remarcar ante Ámbito que “todos los meses reciben el fondo asignado para seguridad” y que “no debería haber” tironeo por fondos. En esa línea, revelaron que en el encuentro se insistió en que la reglamentación contempla sanciones para las empresas que incumplan con la instalación de cámaras, en materia de “pérdida de subsidios e inhabilitación de unidades”. Y, en paralelo, resaltaron que en la reunión no se conversó sobre un pedido de aumento del boleto.