A la exigencia de un sector de los docentes bonaerenses -que llevaron adelante un paro de 48 horas la semana pasada- se sumó ayer el pedido del Frente de Unidad Docente Bonaerense (FUDB), que nuclea al grueso de los trabajadores de la educación del distrito y que tiene buena sintonía con la gestión de Axel Kicillof.

El FUDB solicitó la convocatoria a paritarias al ministro de Trabajo de la Provincia, Walter Correa, basada en el “compromiso asumido por las Organizaciones Sindicales Docentes y el Gobierno Provincial de llevar a cabo la reapertura de la misma durante octubre, para la discusión del último trimestre del año”.

“Esta reunión se hace necesaria de manera urgente dada la situación inflacionaria, agravada por la especulación de sectores que impulsan desajustes económicos y financieros que perjudican los salarios de los Trabajadorxs y que las Organizaciones que integramos el FUDB rechazamos categóricamente”, especificaron los gremios.

Lo propio hizo la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) bonaerense, que entiende “indispensable que podamos continuar trabajando en conjunto, entre el Estado provincial y los sindicatos, para sostener una paritaria abierta y permanente que nos permita actualizar los haberes de los estatales bonaerenses con el objeto de garantizar que los salarios de los estatales no pierdan a manos de la inflación, pero además, logremos recuperar poder adquisitivo salarial”.

A esos reclamos se plegó también el de la Asociación Judicial Bonaerense (AJB), que le solicitó al Gobierno de la Provincia la reapertura de la paritaria vigente que, según lo acordado en la última mesa de revisión, contemplaba la continuidad de la discusión para este mes de octubre.

“Teniendo en cuenta la escalada inflacionaria que atraviesa el país, con la consecuente pérdida del poder adquisitivo de trabajadores y trabajadoras judiciales, la AJB considera fundamental que se cumpla con la pautado, se retome la negociación salarial, de modo tal de garantizar que los salarios se ubiquen por encima de la inflación”, expresaron.

En Santa Fe, en tanto, los gremios municipales llevaron el reclamo un paso más allá y realizaron un paro de 48 horas. La medida fue suspendida por los trabajadores de la capital santafesina tras llegar a un acuerdo salarial con el Gobierno local.

En el caso de la ciudad Santa Fe, la Asociación de Obreros y Empleados Municipales (Asoem) levantó un paro de 72 horas que se había iniciado el martes al recibir una oferta del 110% de aumento hasta noviembre.

En cambio, la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales (Festram), que reúne a la mayoría de los gremios a nivel provincial, ratificó la continuidad de su plan de lucha, que esta semana constó de un paro por 48 horas entre el miércoles y hoy, y tiene previsto otro, pero de 72 horas, para la próxima semana.

Jujuy, por su parte, reabrió la paritaria con los trabajadores estatales, luego de sendos reclamos de los gremios a Gerardo Morales.