La devaluación posterior a las PASO aceleró una tendencia que ya era una realidad en las provincias de frontera: la llegada de visitantes de países limítrofes con el solo fin de realizar tours de compras, atraídos por los beneficios del tipo de cambio en nuestro país.

Esta situación tuvo este fin de semana un rebrote, en especial en la zona cordillerana, con el arribo de chilenos a provincias como Mendoza para realizar compras en supermercados, locales de indumentaria y consumos gastronómicos. El afluente hizo que en los comercios subieran los precios más que en otras. Al menos durante el fin de semana.

Antes de las primarias, los valores en el país ya eran ventajosos y desde la semana pasada, con la escalada del blue y la devaluación de oficial, esa brecha creció y los visitantes llegan desde Chile para comprar todo tipo de productos (excepto electrónicos, rubro donde Argentina sigue siendo caro aún con la cotización actual de la divisa norteamericana).

A la devaluación se sumó un factor adicional que hizo que llegaran más contingentes: los pasos terrestres en la Cordillera, con el Cristo Redentor como el más transitado, estuvieron cerrados en semanas previas a causa de las intensas nevadas. En ese sentido, hubo un mayor tráfico como ya había ocurrido al inicio del otoño, con demoras en la aduana de hasta cinco horas. Se espera que a partir de la primavera se redoble el tránsito desde el país trasandino, ya con menos preocupaciones para circular por las rutas de montaña (en invierno se requieren, por ejemplo, cadenas).

“Es difícil ponderar cada factor en los precios en este contexto, pero da la sensación de que la llegada de chilenos hizo que en la provincia se recalentaran aún más los precios”, señalaron desde el Gobierno mendocino a este medio.

La situación no es nueva y recuerda a un comportamiento que en Mendoza ya se había percibido en 2001, en aquel entonces de forma más notoria porque no había inflación. “Los fines de semana subían los precios de artículos de ropa o de regionales por la llegada de los chilenos. Ahora pasa lo mismo: de lunes a jueves se ven otros precios, pero es difícil tener las pruebas por la propia dinámica de lo que está ocurriendo en el país”, agregaron desde la administración de Rodolfo Suarez.

La tendencia a remarcar entre viernes y domingo aflora en rubros como el de indumentaria y el gastronómico, donde se observaron diferencias de hasta 20%, aunque con la espiral inflacionaria resta ver cómo se acomodarán los precios en los próximos días.

Esta suba adicional se observa en menor medida en supermercados, ya que buena parte de los visitantes chilenos aprovechan su estancia en el distrito cuyano para hacer las compras del mes, con un ahorro de prácticamente el 50%, diferencia que les permite costear parte de la estadía en Mendoza.

La situación se replica en menor medida en otras provincias como Neuquén o San Juan, también con pasos de frontera, pero en Mendoza se acrecienta porque del otro lado de la cordillera está Santiago de Chile, la capital y ciudad más poblada de ese país.

Los tours de compras también vienen en alza en la costa del Río Uruguay, como en las entrerrianas Colón o Gualeguaychú. O en Misiones y Corrientes, con el desembarco de personas provenientes de Brasil y Paraguay.