La Secretaría de Energía de la Nación que comanda Flavia Royón prorrogó por cien días, a partir de ayer, los contratos de concesión de las centrales hidroeléctricas Alicurá, El Chocón Arroyito y Cerros Colorados, ubicadas en la región del Comahue, al norte de la Patagonia. La medida fue cuestionada por Neuquén, donde catalogaron la extensión como “un desastre”.
La prórroga anterior había sido dispuesta el 10 de julio último y ahora el Gobierno volvió a utilizar ese mecanismo para “preservar la seguridad de las personas y los bienes ubicados en la Cuenca”. En ese marco, tanto Neuquén como Río Negro amenzaban con judicializar la cuestión, ya que en ambas provincias entienden que es potestad local la administración de los recursos que se generan.
Los ánimos se habían calmado cuando Royón anunció la conformación de un equipo de trabajo que permita en 120 días elaborar una propuesta para la renovación de las concesiones de las centrales hidroeléctricas, con participación de ambas provincias, hecho que había sido celebrado por los mandatarios Omar Gutiérrez (Neuquén) y Arabela Carreras (Río Negro).
La Secretaría había dispuesto que la estatal Enarsa asumiera “transitoriamente” el control de esa represas, ante la inminencia de la finalización de los contratos de concesión luego de 30 años en manos privadas.
Las represas involucradas son las primeras de un total de 22 complejos hidroeléctricos cuyos vencimientos de concesión comenzarán a operar a partir de agosto.
Ahora, la nueva prórroga desató cuestionamientos en Neuquén. El representante de la provincia en la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC), Elías Sapag, dijo que “Nación está haciendo un desastre”. Y señaló que nunca se convocó a reuniones de la comisión de transición.
En declaraciones al diario Río Negro, el funcionario agregó: “Es una irresponsabilidad total, porque no consultaron nada a las provincias”.
Medida
La Secretaría de Energía también dispuso que la estatal Enarsa continúe como veedor para las tres represas, según la Resolución 815/2023, publicada en el Boletín Oficial. Por ese motivo, las concesionarias “deberán continuar a cargo del complejo hidroeléctrico correspondiente y cumplir con todas sus obligaciones derivadas del contrato durante el referido período”, de acuerdo con el texto oficial. Las empresas concesionarias a las cuales se les vencen los contratos son AES (Alicurá), ENEL Generación (El Chocón Arroyito) y Orazul Energy (Cerros Colorados).
Energía aclaró que la nueva prórroga fue dispuesta en base a informes de Enarsa y del Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE), con el fin de “realizar un traspaso ordenado tanto de los bienes, como de la operación y mantenimiento de las centrales”.
Las concesiones tienen un plazo de treinta años y sus vencimientos operan en 2023. También, señaló que “como resultado de las reformas efectuadas en el sector eléctrico en la década de 1990 a partir de la sanción de la Ley N° 24.065, se estableció la división vertical de la industria eléctrica y se declararon sujetas a privatización las actividades de generación, transporte y distribución de energía eléctrica”.