El hecho se produjo el día lunes, cuando la chiquita de 4 años le contó a su mamá que había sido «manoseada» por el verdulero del barrio. El hombre de casi 50 años y de apellido Araoz Ramírez, es de nacionalidad boliviana y desde hace dos años se encuentra en el país.
Hace algún tiempo comenzó a alquilar un local una verdulería en la calle Restelli y Hernandarias. No tiene muchos familiares en la localidad ,sólo a su esposa y a su hijo que es mayor de edad.
«Esto pasó el jueves de la semana pasada. Yo tengo una heladería la lado de su comercio. Mi hija es una nena muy sociable, muy dada y siempre le dije que no quería verla en locales de otros porque era peligroso» cuenta Gabriela, mamá de la nena, quien agrega «Ese día, mi hija estaba jugando en la vereda, él la llamó desde el local y la hizo entrar. Ahí se produjo el abuso, ella salió corriendo de ahí».
La menor desde hace varios días se encontraba desganada y compungida hasta que pudo contarle a su madre lo que había ocurrido. «Se sentía muy mal. Me lo contó como si ella hubiera sido la culpable. Era muy difícil verla así».
Inmediatamente, la noticia se extendió por el barrio y los vecinos quisieron quemarle el local al delincuente. «Yo les pedí a todos que no lo hagan. No porque lo defienda sino porque él alquila ahí. Le estaríamos haciendo daño a otra persona, que es el propietario del local».
La denuncia fue radicada en la Comisaría N°3 de Transradio, el hombre a las pocas horas fue liberados y hay versiones que afirman que estaría pensando en volver a abrir el comercio.