Todos los sindicatos provinciales realizan una huelga que coincidirá mañana con el paro nacional de la CGT y las CTA. La decisión del gobierno no regirá para la protesta nacional.
El gobernador de Santa Fe, el radical Maximiliano Pullaro, decidió descontar el día a los trabajadores estatales provinciales que realizan un paro de 48 horas, desde este miércoles. «No es justo que en esta instancia, todos los gremios públicos convoquen a un paro», sostuvo el ministro de Gobierno e Innovación Pública, Fabián Bastía, en la conferencia de prensa en la que hizo el anuncio.
La medida se adoptó mientras se desarrollan ásperas negociaciones paritarias que aún están abiertas. La medida fue convocada por la docencia de Amsafe y Sadop, más el resto de los estatales nucleados en la Unión Personal Civil de la Nación (UPCN), la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) y el Sindicato de Profesionales Universitarios de la Sanidad (Siprus). El paro se lleva a cabo con una importante adhesión, de acuerdo a los primeros datos.
El ministro Bastía estuvo acompañado en el contacto con la prensa por sus pares de Economía, Pablo Olivares, y de Educación, José Goity. Se aclaró que el descuento no regirá para la huelga nacional de este jueves que organizaron la CGT y las dos CTA, entre otras organizaciones, por considerar que la medida afectará el transporte público de pasajeros, lo que imposibilitará que los empleados lleguen a sus lugares de trabajo. Bastía indicó que el gobierno provincial heredó una paritaria «altísima, de difícil cumplimiento». «Más que un descuento, es no pagar un día no trabajado», sostuvo Goity y ratificó el Programa Asistencia Perfecta, por el que los estatales sin ausencias laborales recibirán un plus salarial, que es rechazado por los gremios.
Desde las organizaciones gremiales hubo una reacción casi inmediata. «No solamente rechazamos las amenazas y las extorsiones, sino que vamos a llevar adelante el paro de dos días. Es un paro que fue votado por más de 29.000 compañeros, donde también hubo amenazas. Así y todo, definimos rechazar la propuesta paritaria y llevar adelante el cese de actividades», señaló Rodrigo Alonso, secretario general de Amsafe. Desde la Seccional ATE, de Rosario, Lorena Almirón, expresó: «Nuestro sueldo no puede seguir siendo la variable de ajuste. El gobierno de Pullaro se desentiende de la importancia de garantizar derechos y acceso a servicios en el sector público en una situación crítica para las mayorías. Llevamos perdido un 35% de poder adquisitivo, lo que deriva en un salario de subsistencia».
También opinó sobre la decisión del Poder Ejecutivo local, Martín Lucero, del gremio docente Sadop Rosario: «Con esa amenaza de la declaración jurada y el descuento, el gobierno consigue lo contrario, logra que la gente se enoje más y ratifique su decisión de parar», dijo. La referencia a la declaración jurada obedece a que el Ministerio de Educación hizo circular una planilla en los establecimientos públicos, para que cada docente consigne si adhería o no a la medida de fuerza, para evitar el descuento de la jornada de trabajo. Otro dato del reclamo que comenzó hoy en Santa Fe es que, por primera vez, se sumó a una huelga de este tipo el gremio de los municipales rosarinos.