El gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, publicó en su cuenta de X un mensaje dirigido a sus pares del país para que pongan en marcha el cobro de la atención de la salud a extranjeros en los hospitales públicos. Lo hizo al cumplirse dos meses de haber adoptado la medida, tras la decisión del Gobierno nacional de pasar la motosierra a los fondos destinados a sostener el sistema, sequía de recursos que afectó la prestación de los servicios de salud en sus distintos niveles. «Invito a todas las provincias y gobernadores a imitar la medida a nivel provincial. Es justa y, por sobre todas las cosas, en momentos difíciles es necesaria», expresó.
La decisión de cobrar a los extranjeros fue tomada por Sáenz a través del DNU 129, que luego se convirtió en ley al ser aprobado en ambas cámaras. La medida establece que «los extranjeros que pertenezcan a las categorías de residentes transitorios y precarios contribuyan también a solventar los gastos que genera su atención sanitaria en los centros de salud provinciales, ya sea por sí mismos o a través de un seguro de salud». «Con esta medida se procura garantizar la solvencia del sistema de salud público salteño», se destacó.
La decisión, de todos modos, prevé que «la atención sanitaria a los extranjeros para casos de urgencia o emergencia (cualquiera sea la categoría que éstos revistan), no podrá serles negada ni restringida, toda vez que se trata de una cuestión humanitaria. El Estado provincial arbitrará con posterioridad los medios necesarios para percibir los gastos ocasionados», se indicó.
Sáenz aseguró en su video que «a partir de ese momento, tenemos camas disponibles, tenemos operaciones programadas disponibles para los salteños, para los argentinos». Y destacó que el cambio no solo liberó recursos hospitalarios para uso local sino que también contribuyó a mejorar la calidad del servicio de salud pública.
Sus palabras fueron después de dos hechos. El primero, la presentación -hace dos semanas- de un proyecto similar en el Congreso de la Nación que lleva la firma de los diputados nacionales salteños Pamela Calletti, Pablo Outes y Yolanda Vega, que responden a Sáenz y votaron a favor de la Ley Bases en la última sesión. Según el proyecto: «Es necesaria la adopción de medidas para que el servicio de salud en Argentina sea de calidad y más eficiente, reduciendo costos y erradicando prácticas abusivas en el uso del sistema de salud público de nuestro país en detrimento de los argentinos». De ahí el pedido del mandatario salteño a sus pares para que apoyen esta iniciativa.
El segundo hecho fue el mensaje de monseñor Luis Scozzina, quien está a cargo de la Diócesis de Orán, en donde se encuentra uno de los hospitales de mayor demanda, por encontrarse a 50 kilómetros del límite con Bolivia. En una entrevista, el sacerdote sostuvo que la disposición del gobierno provincial de cobrar por las atenciones médicas que no sean de urgencia a los extranjeros «es una medida que tiene cierto tinte xenófobo». «La realidad de nuestra gente sencilla es que tiene parientes de un lado o del otro. Una cosa es que alguien venga exclusivamente para hacerse una operación aquí o sacar una ventaja es una cosa, pero está la gente simple que no tiene documento propio pero tiene a sus familiares aquí. En frontera, no todo es blanco o negro», remarcó. Ante la repercusión de sus palabras, aclaró luego que no fue una crítica directa al gobierno pero sí una preocupación y que debe evitarse cualquier hecho de discriminación.
Hace unos días, el ministro de Salud de Salta, Federico Mangione, hizo un balance de la decisión provincial en declaraciones a una radio. «Antes estábamos con los pasillos colmados de pacientes y hoy estamos bastante holgados con la atención. El mes pasado, de 3.300 pacientes que se atendían, hoy hemos bajado a 60 pacientes, en Orán. Si a eso le ponemos el valor de la consulta, que es de $6.600, nosotros tendríamos que estar ganando más de $ 23 millones, solo en consultas».
De acuerdo al funcionario, desde hace unos meses funciona en el hospital de Orán un sistema automatizado de historia clínica digital que detectó que el 10% del presupuesto de salud iba a la atención de extranjeros. «No solo en consultas, hay que agregar análisis de sangre, radiología, estudios de mayor complejidad y además, el tratamiento que el paciente necesite», profundizó.
Se supo que Santa Cruz estaría analizando instrumentar un sistema similar, mientras en Neuquén y en Corrientes se instaló el debate en las legislaturas locales.